EL PLAN
Diecisiete no es un número
mesiánico y menos en Paraguay. El corolario de un extraño altercado propio de la
condición humana arroja el deceso de 11 campesinos y seis policías tras un
pseudoenfrentamiento entre grupos de poder acaecido el pasado quince de junio en
el paraje de Morombí, al nordeste del país: un evento con tintes políticos sin
lugar a dudas, que ocasionó la caída del presidente Fernando Lugo.
Las balas de los
francotiradores (orquestados por opositores bajo la premisa de tierra y
libertad, la eterna lucha por las tierras) en la matanza sucedida en Curuguaty
(departamento de Canindeyú, frontera con Brasil) tiene toda la pintura de un
cuadro de Velásquez, donde los que disparan son un senado derechista paraguayo
que políticamente corrupto, orquesta
una muy común forma de derrocar al representante del poder ejecutivo de un país.
Pese a que los medios locales
hablan de un entrenamiento campesino, no se comprende cómo policías militarmente
adiestrados -bajo el denigrante y colonialista Plan Colombia al servicio del
imperialismo yanqui- pudieron caer fácilmente en una supuesta trampa tendida por
campesinos. En esta masacre, la derecha acribilló campesinos, matando a 11,
quedando unos “sin cuenta” heridos. Entre los policías murió el jefe del GEO
(Grupo Especial de Operaciones), el hermano del teniente coronel Alcides Lovera,
jefe de seguridad del presidente Lugo. Es de aclarar que policía y fiscalía,
así como el agro
paraguayo son subvencionados por el USAID (Plan de apoyo gringo).
El plan consiste en
criminalizar y dividir, sectorizar el pensamiento de las organizaciones
campesinas (unos contra otros como un principio de enconosa guerra civil),
empujando campesinos también a abandonar el campo, lo que fortalece el
agronegocio en manos extranjeras (Grupo Zuccolillo, socio de Cargill, que
construyó Puerto Unión, astillero granelero mas importante en el río Paraguay
sin restricción alguna y atentando contra la soberanía guaraní). Hay que
recordar que dichas transnacionales no pagan impuestos, amparados por la férrea
protección del congreso, llegando a producir más de seis mil millones de dólares
al año. Este proceso de “desagrarización” es lento, doloroso atentando
inevitablemente contra la soberanía alimentaria de los guaraníes.
EL
ESCENARIO
Paraguay es un país que vive
del IVA (impuesto del valor agregado) del cual recauda un 60% y su presión
tributaria en es apenas del 13% sobre el PIB. Los latifundistas no pagan
impuestos. El impuesto Inmobiliario es del 0,04%, casi 5 millones de dólares,
según un estudio del Banco Mundial, 2007. La economía guaraní, es una de las
más desiguales del mundo. El 85 % de las tierras, unas 30 millones de hectáreas,
está en manos del 2 por ciento de propietarios según el censo agropecuario 2008
de la república (Censo 2008).
Con una gravitación
congresista mínima y un panorama económico en estas instancias, a cualquier
mandatario le queda jodido gobernar! Para suplir tal deficiencia, el ex-clérigo
paraguayo optó lentamente por un progresivo intercambio de concesiones a la
derecha opositora que lo terminó de llevar al escarnio público, quienes no
contentos con tales aquiescencias, hicieron lo que tenían que hacer, exterminar
su mandato. Así en estas concesiones aparecen nombres como los de Héctor
Cristaldo, precandidato a diputado para las elecciones de 2013
por un movimiento interno del Partido Colorado, liderado por Horacio
Cartes; un empresario investigado por Estados Unidos por lavado de dinero y
narcotráfico, contrabando de cigarrillos denunciado por cables del Departamento
de Estado de USA y
publicado por WikiLeaks. A su
vez, estos terratenientes paraguayos, por supuesto viven en ostentosas mansiones
en Punta del Este o Miami, estrechando fuertes vínculos con las transnacionales
ligadas al agronegocio dominando el espectro político nacional, con amplias
influencias en los tres poderes del Estado. Allí reina la UGP (Unión de Gremios
de Producción, dirigida por Cristaldo) apoyada por las transnacionales del
sector financiero y por la derecha por supuesto.
Todo por supuesto dentro del
ambiente interno del país de los defensores del Chaco: orden oligárquica de
desalojo del predio finquero de Curuguaty emitida por un juez y una fiscal de
distrito protegiendo intereses latifundistas, una oligarquía terrateniente (Blas
Riquelme, con mas de 70 mil hectáreas, proveniente de la dictadura de
Stroessner, 1954-1989) instigando y persiguiendo despiadadamente campesinos
arrebatándoles sus tierras, el avance quasi-imparable del agronegocio con
ínfulas transnacionales (Monsanto,
implicado en producción de maíz transgénico en el Paraguay), por supuesto:
con miras a la plataforma oligárquica de la derecha que quiere el retorno
triunfal en las elecciones del próximo 2013. Riquelme, por ejemplo, fue
presidente del opositor Partido Colorado y senador de la República, ostenta
varias cadenas de supermercados y establecimientos ganaderos, que usa como
platea para apropiarse mediante subterfugios legales de unas
2.000
hectáreas, pertenecientes al Estado paraguayo.
La incómoda presencia del
destituido presidente procede desde su campaña manipulada por los medios antes
de agosto de 2008, atacada siempre por la posición reaccionaria de sus
opositores. Estas joyitas antes descritas, nunca permitieron
aquel
espacio que Fernando Lugo propiciaba para la protesta social y el
fortalecimiento de las masas -argumentando desde bastiones fascistas- que la
organización popular propuesta por la presidencia era francamente incompatible
con la dominación de clase que la derecha siempre proponía, vilipendiando al
pueblo a todo momento.
Esa es una derecha
fomentada desde Washington cuyas banderas son mas que conocidas, sucias!! Una
banderita es frenar la potenciación del eje Chávez-Correa-Evo con la sombra de
un Lula da Silva, evitando que el Mercosur tome una fuerza beligerante y
autónoma en el mercado internacional.
Así, la tal masacre no deja de
ser un bajo pero redituable golpe, que termina en tragicomedia paraguaya. El
maese Lugo, paga por su esperanza democrática a un imperialismo implacable ¡…y
aquella institucionalidad del capitalismo oprobioso se ve reflejada en un
“juicio político sacado de la chistera”! violando las normas internacionales del
principio de la libre autodeterminación de los pueblos.
La otra cara de este teatrino son los medios
internacionales. La manipulación de la información pese a la fuerza política de
quienes tratan construir a cada momento, un periodismo objetivo. La noticia de
la destitución como era de esperarse le dio la vuelta al mundo, y hasta el Jerusalem Post,
(vía Reuters), y agencias como Al
Jazeera, Pravda,
citando las medidas de presión económicas, dieron cuenta del suceso. El anterior
ejemplo de manipulación informativa, deja claro que “una herramienta del
terrorismo de estado orquestado desde el ala parlamentaria derechista” es
obviamente, el manejo de la desinformación, cuyo objetivo es aniquilar el
mandato del pueblo, en este caso el motor populista que eligió a Lugo.Esto hace
que se tengan reacciones internacionales (y sobretodo imágenes ambiguas del la
realidad) en los que el Mercosur, manda muy lejos (a
volar muy lejos) la presencia paraguaya en la política internacional en esta
área de la orbe, vetándole el derecho a participar en la XLIII Reunión del
Consejo del Mercado Común y Cumbre de Presidentes del Mercosur”. Países como
Ecuador, Venezuela, Uruguay, Chile y hasta el reaccionario y derechista gobierno
colombiano siguen presionando la causa Paraguaya y han retirado o llamado a sus
embajadores en Asunción. Lo propio hace México y Perú. Tal cirquito llamado
“golpe de estado” – que no es más que un golpe parlamentario – provocó condenas
obvias entre los países de la región: Argentina y Brasil (retirando y
consultando representaciones diplomáticas) fueron pioneros en condenar tales
desmanes antidemocráticos del golpe asestado al agobiado pueblo Paraguayo.
Varias organizaciones regionales rechazaron el juicio parlamentario a que
sometieron a Lugo, entre
ellas, la OEA (Máximo órgano de concertación diplomática en América Latina),
el Parlamento Latinoamericano (Parlatino), la Asociación Latinoamericana de
Integración (Aladi), y países miembros del bloque regional de la Alianza
Bolivariana de los Pueblos de Nuestra América (ALBA). El hecho de utilizar al
pueblo y masacrarlo con fines imperialistas no es nuevo en América Latina. Esta
es una lección iterativa que no podemos dejar perder de vista y a la que debemos
estar siempre alertas. Contra esta mancilla continua solo la lucha
revolucionaria, el fortalecimiento en la conciencia de clase, las movilizaciones
internacionales y la organización popular pragmática, favorecerá nuestra lucha
perenne y otros proyectos en pro de transformaciones sociales radicales. La
oligarquía pro imperialista y su consecuente innato fascismo contra el pueblo
continuarán siempre con las componendas y la conspiración deletérea, pero
nuestra lucha y la de nuestras descendencias es recalcitrantemente inagotable!La
causa del fantasmagórico golpe ultraderechista y expoliador debe ser denunciada.
Evitemos que los zombis de la derecha vuelvan a cometer sus atropellos
financiados por los tentáculos oprobiosos del imperialismo. Evitemos siempre,
tener que repetir al final de los finales: que los muertos los ponga el
pueblo…
Documento del Banco
Mundial. Paraguay. Impuesto Inmobiliario: Herramienta clave para la
descentralización fiscal y el mejor uso de la tierra. Volumen I: Informe
principal. 2007.
Censo Agropecuario
Nacional 2008.
Mendez-Grimaldi I (2012) http://ea.com.py/monsanto-golpea-en-paraguay-los-muertos-de-curuguaty-y-el-juicio-politico-a-lugo/
Nella diffusione e/o ripubblicazione di questo articolo citiamo la fonte: www.utopiarossa.blogspot.com
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